¿CONOCES A JESÚS?

Muchos han escuchado de Jesús, pero saben muy poco de Él. ¿Sabías que Jesús murió y resucitó, no con fines de iniciar un movimiento espiritual, sino más bien porque Él te ama y quiso proveer un camino para que tú le conozcas?

La Biblia habla del amor de Dios. En el principio, Dios nos creó para que reflejáramos su imagen y para tener una relación con Él (Génesis 1:27). Fuimos creados como seres buenos, pero el pecado entró al mundo y el hombre comenzó a vivir su vida fuera de la voluntad de Dios en vez de vivir la vida que Dios había designado para sus creaturas.

Dios nos amó tanto, que envío a su único Hijo para morir en la cruz por nuestros pecados para que tuviéramos una relación con Él. La resurrección de Jesús es prueba que ahora somos aceptados y justificados. ¡Podemos tener vida eterna y experimentar el gozo de conocer a Dios aquí en la tierra!

Si deseas tener una relación con Dios, la Biblia nos dice que ésta inicia con reconocer que somos pecadores y que no hay otra manera para ganar nuestro camino a Dios (Romanos 3:23-26). Debes creer y confesar que Jesús es el Señor (Romanos 10:9) y permitirle guiar tu vida. 

Para conocer a Dios y tener propósito en tu vida, comienza con tener una relación con Cristo. Sigue los siguientes pasos para iniciar una nueva vida con Jesús:

Paso 1:

El propósito de Dios es vida y paz:

El deseo de Dios es que tu tengas vida y paz, ahora y por toda la eternidad.

“El ladrón no viene sino para hurtar, y matar, y destruir: yo he venido para que tengan vida, y para que la tengan en abundancia.” Juan 10:10

Paso 2:

Reconocer el problema: pecado y separación: 

Fuimos creados para conocer, amar y glorificar a Dios. Cuando escogimos ir por nuestro propio camino, viviendo la vida voluntariamente desobedeciendo a Dios, estamos escogiendo vivir una vida separada de Dios ahora y por toda la eternidad.

La Biblia dice que somos pecadores: “Por cuanto todos pecaron, y están destituidos de la gloria de Dios.” Romanos 3:23

Pero Dios en su amor “amó al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna.” (Juan 3:16)

Dios también es junto y su Palabra nos dice que “la paga del pecado es muerte: más la dádiva de Dios es vida eterna en Cristo Jesús Señor nuestro.” Romanos 6:23

Paso 3:

No podemos salvarnos nosotros mismos:

Porque Dios es Santo, Él no puede permitir que el pecado entre al Cielo. Muchas personas creen poder entrar al cielo en sus propios esfuerzos, mediante buenas obras, o asistir a la iglesia.

La Biblia dice… “El que camina en su rectitud teme a Jehová: Mas el pervertido en sus caminos lo menosprecia.” Proverbios 14:

¿Cómo entonces puede una persona pecadora entrar al Cielo donde Dios no se permite el pecado?

Paso 4:

Somos salvos por gracia:

La buena noticia es…que, a pesar de nuestro pecado, Jesucristo murió por nosotros.

“Porque por gracia sois salvos por la fe; y esto no de vosotros, pues es don de Dios: No por obras, para que nadie se gloríe.” (Efesios 2:8-9). “Más Dios encarece su caridad para con nosotros, porque siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros.” Romanos 5:8

Paso 5:

Responder al regalo de Dios mediante la fe:

“Que, si confesares con tu boca al Señor Jesús, y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo.” Romanos 10:9

¿Deseas aceptar a Jesús como salvador y Señor de tú vida? Para ello, has esta oración…

“Señor Jesús, gracias por haberme dado la oportunidad de entender que tus planes para mi vida son de vida eterna. Por todo este tiempo he vivido mi vida a mi propia manera, haciendo todo lo opuesto de lo que tú quieres para mí. Reconozco que soy pecador. Que no hay salvación en nadie más que a través de Jesús quien murió en la cruz para darme vida eterna. En este instante me rindo ante tus pies, pidiendo que me perdones y restaures mi vida para tener una relación íntima con Dios. Toma mi pasado, mi presente y mi futuro; y ayúdame a vivir una vida que glorifique tu nombre. En el nombre de Jesus lo pido. Amén.

¡Te felicito! Has hecho la decisión más importante en la vida. Ten la seguridad que tu nombre ha sido escrito en el libro de la vida (Mateo 10:32; Apocalipsis 3:5).

Por último,envíanos un correo electrónico dejándonos saber que has hecho esta decisión en tu corazón. Quisiéramos orar por ti y ayudarte a caminar con Jesús en esta nueva vida que comienzas hoy.